Lluvias de primavera

No soy de esas personas que cuando llueve piensa que el día está horrible. Por el contrario, creo que no hay mejor escenario para una panzada de películas mechada con mate y tortas fritas.
Pero cuando todos los planes eran para un día de sol, sí, la verdad es que da bronca.

Veníamos con todas las fichas para tener el alta por estos días, y no fue así. Ni hay picnic al aire libre ni tortas fritas. Estamos en ese limbo en donde la más leve brisa te parece un huracán y volvés a tener la sensación de que la salud de los chicos, más allá de todo el trabajo increíble de médicos y enfermeras, depende de qué lado caiga una moneda que fue arrojada al aire.

Desde la semana pasada, los tres comenzaron a desaturar (les baja del nivel de oxígeno) a veces cuando comían, lo cual es lógico porque todavía están aprendiendo a succionar, tragar y respirar al mismo tiempo, y a veces en otros momentos. Piensen que la fecha de parto era el 7 de noviembre y nacieron el 8 de agosto.

Santiago volvió a tener bigotera todo el tiempo con el oxigeno en mínimo, pero lo bueno es que ya no tiene sonda y se alimenta día y noche por succión.
Abril, también volvió con la bigotera, al principio sólo para comer, pero desde hace dos días, la tiene permanente. Sigue con la sonda.
Jazmín, hace cuatro días que venía medio mal y desganada, por lo cual cada vez comía más por sonda y menos por succión, hasta que hizo un desaturación muy grande que nos asustó a todos porque ella hace más de un mes y medio que no requiere ningún apoyo para respirar. De manera que lo primero que había que descartar era algún tipo de infección. De los análisis de laboratorio se pasó a los cultivos, colocarle una vía, los antibióticos y el ayuno. Para tenerla más controlada, la pasaron de nuevo a terapia intensiva. Por suerte, por ahora los resultados de los cultivos van dando negativos para lo más grave. Pero encima de todo esto, el martes, en el control oftalmológico le descubren una retinopatía, por lo que deciden operarla con láser, intervención que le realizaron ayer a la tarde y de la cual salió bien de la anestesia. Los resultados de la operación recién se podrán saber en una semana o diez días.

Hace dos semanas pensábamos que quizás hoy estábamos todos en casa, y desde hace siete días venimos para el cachetazo.
Nuestra mente sabe que todo lo que se les hace es lo necesario para cuidarlos, pero nuestro corazón no quiere que los pinchen más.

Subimos y bajamos con tal velocidad que hay curvas en las que no nos queda otra que derrapar un poco para poder seguir el rumbo.
El viaje por la experiencia de la Neo sigue, se corrió la línea de llegada.

Ahora… si pudiera dejar de llover y saliera un poco el sol, estaría buenísimo.

Post escrito por Ella