A un año del milagro

Antes y después del Toddy Jazmín, Santi y Abru

Hoy 8 de agosto hace exactamente un año que un milagro se desparramó en nuestras vidas. Los tres mosqueteros llegaron al mundo.

Hoy hace un año que corríamos a la guardia por mis contracciones prematuras y yo juraba que no iban a nacer, que era muy pronto. Contra todos nuestros pronósticos, a las 27 semanas de gestación, tres meses antes de la fecha de parto, nacieron nuestros guerreros.

Hace un año ella y yo pasábamos la primera noche en la maternidad sabiéndonos mamás de tres soles que tenían que batallarla por unos largos meses, pero estábamos más felices de lo que jamás hubiéramos imaginado. Hoy un año después, los cinco en casa, con chiches desparramados por todo el living la emoción es tan grande que sentimos que el milagro sigue ocurriendo cada día cuando nos miran y sonríen, cuando nos abrazamos los cinco en la colchoneta y ellos aprovechan y nos muerden y nos tiran del pelo. Están hermosos, cariñosos, dulces, atorrantes, vagos, demandantes, sonrientes, brillantes, dueños de una luz que ilumina y derrite a todo aquél que se anime a mirarlos a los ojos.

Un enorme y gigantesco GRACIAS a todos los que acompañaron a esta familia desde el inicio, cuando eramos dos y una panza, a todos los que nos tuvieron en sus pensamientos e hicieron fuerza para que se pongan bien, a los que llegaron después y siguen visitándonos, a los que cada vez que escribimos un post, (poco ultimamente) putean para que sean más seguidos, a los que nos abrazan espiritualmente de todas partes del mundo, a los que se alegran cuando nos alegramos y nos alientan cuando lo precisamos, a la tía Sol que nos hace los días contentos y trabaja de tía con un amor difícil de describir, a la abuela stella por las horas dedicadas, por los detalles de abuela por los detalles de mamá, por estar cerca siempre sin peros. A Nori, Cori, Miriam , que los miman y nos bancan en todas y cuando digo en todas es en TODAS, y son por elección nuestra, parte de esta familia. Al tío Lean , que contesta nuestras dudas médicas boludas como si fueran importantes y les hace mimitos con la barba. Al abuelo Osvaldo que no le alcanzan los baberos y nos regaló una cámara de video para registrar como crecen. Al abuelo víctor que los cuida con mucho amor. A Eli , Gaby y Juancito , que llegaron a nuestras vidas para enriquecerla.

A los tíos Julio y Susana que amorosamente preparan su casa para que toda la familia pueda festejar junta. A la bisabuela alicia que cocinó para la fiesta, a la tia nilda que también cocinó, a la Abuela Stella que organizó la fiesta de los peques. A Lore, Myru, y todos los padres múltiples que nos abrazan con cada llamado desde Rosario a Usuahia. Un enorme gracias a todos.

Ojalá algún día estos enanos puedan tener aunque sea una pequeña noción de toda la gente que los piensa y los quiere bien. Sus mamás se van a encargar de que todo este amor les llegue y puedan usarlo para crecer bien.

Prometemos fotos de la festichola.